Tras un diálogo entre las partes, Carrizo queda disponible para jugar, pero no seguirá en el club. El jugador tenía en su contrato una cláusula de renovación automática que se activaba en función de la cantidad de partidos jugados. Esta cláusula, considerada absolutamente válida si el sueldo y otros aspectos ya estaban pactados, se activaría ante un evento externo, como cumplir una cantidad de partidos de titular.
Actualmente, las partes llegaron a un acuerdo que debe ser firmado para evitar que dicha cláusula de renovación automática se ejecute. El objetivo es anular o dejar sin efecto esa cláusula del contrato.
El contrato de Carrizo tiene vigor hasta diciembre, y el jugador tendría derecho a cobrar su salario hasta el último día trabajado, es decir, hasta el 31 de diciembre, según el máster en Derecho Deportivo, Gerardo Acosta.
Al finalizar este ciclo con el “Ciclón”, Carrizo registra 268 juegos, 34 goles y 47 asistencias a la fecha.
Aunque el jugador ya está dando señales de que se quiere ir, se pone a disposición del cuerpo técnico. Existe información, aparte de la desvinculación, de que el “Pachi” podría jugar en Libertad, club que ha mostrado interés en el mercado pasado.