La deserción escolar en Paraguay es un drama que afecta a miles de niños y jóvenes, especialmente en el interior del país, donde el promedio de años de estudio es de apenas ocho, muy por debajo del mínimo requerido de doc . Así lo reconoció la viceministra de Educación Básica, María Gloria Pereira, quien señaló que esta situación se debe a varios factores, entre ellos la falta de recursos, la pobreza, la migración y la insatisfacción con el currículum.
“En realidad esta es una situación que afecta no solo a educación, porque la deserción escolar no se da necesariamente porque, bueno, no está satisfecho con el currículum o lo que sea, uno de los factores que reconocemos como una limitante es que, sobre todo en el interior, las ofertas que el ministerio da no han crecido hace muchos años”, dijo.
La viceministra explicó que el presupuesto del Ministerio de Educación no ha contemplado lo que se necesita para ampliar el tercer ciclo y la educación media, que requieren de más horas cátedra, equipo técnico, rubros directivos y administrativos. “Es una situación objetiva que vamos paliando en la medida que podemos conocer estas alternativas como EVA, EMA, etcétera”, agregó.
Pero además de la falta de recursos, Pereira admitió que la situación social de las comunidades también influye en la deserción escolar, ya que muchos niños y jóvenes abandonan los estudios para trabajar, sostener a sus familias o viajar al exterior. “Tenemos muchos paraguayos en Argentina, entonces esa es una cuestión que hay que combatir desde varios frentes, no solamente desde el sector educativo”, afirmó.
Dijo que desde su cartera se está focalizando en dos aspectos: por un lado, la alfabetización de la población adulta, que también incide en los números de la deserción escolar, y por otro, la elaboración de un presupuesto que ordene el uso de los recursos y proyecte el crecimiento necesario para mejorar la calidad y la cobertura de la educación.
Mencionó que se enteró de casos dramáticos, como el de una comunidad que hace 20 años no tiene el tercero de la media, y que cada año les fue difícil obtener los recursos. “Un ligero cambio positivo, si queremos ser optimistas, es que antes los años de estudios eran solamente de seis, pasamos a nueve, no es suficiente, tenemos que llegar a doce, tenemos que mejorar las ofertas disponibles, necesitamos mejorar nuestro presupuesto, también necesitamos utilizar mejor los recursos que tenemos”, expresó.
La viceministra concluyó que se necesita como mínimo 10 años para lograr un salto importante en la educación paraguaya, y que se está trabajando con claridad absoluta para ver la situación a partir del análisis que se ha hecho desde que ingresó la nueva administración.