La Comisión Nacional de la Competencia (Conacom) abrió una investigación preliminar tras la repentina suba de precios del combustible registrada en varios emblemas privados. Ricardo Gavilán, director de Investigación de Conacom, confirmó que el organismo tomó intervención ante los indicios iniciales. “Ya estamos investigando sobre el comportamiento de los precios, porque me indigna también cuando suben los precios sin aparente justificación”, expresó.
Explicó que la institución no tiene la función de regular tarifas. “No somos un ente regulador de precios”, aclaró. No obstante, admitió que en contextos donde varios actores económicos adoptan decisiones comerciales simultáneamente, pueden surgir situaciones sospechosas desde el punto de vista de la libre competencia.
“Este elemento es todavía un indicio, es un comportamiento que te permite sospechar de que hubo una conducta llamativa desde el punto de vista a una infracción de la competencia”, sostuvo.
El director agregó que Conacom ya identificó a las empresas que aplicaron estos incrementos inusuales. “Tenemos identificada a las empresas que tuvieron este comportamiento llamativo”, afirmó. Si bien evitó mencionar nombres, aseguró que el proceso de investigación avanzó lo suficiente como para establecer patrones que generaron sospechas razonables sobre eventuales acuerdos ilegales.
Consultado sobre precedentes similares, recordó que en otras ocasiones el organismo también recibió denuncias por prácticas colusorias. “Realmente, en ese caso, los ganaderos nucleados en sus respectivos gremios, denunciaron un oligopolio y un cartel de precios conformados por los frigoríficos”, recordó.
En caso de confirmar que existió una práctica anticompetitiva, la institución podría aplicar sanciones severas a las firmas responsables. Según los marcos legales vigentes, las multas podrían alcanzar “hasta el 20 % de la facturación”, tomando en cuenta las ganancias derivadas durante el periodo de reajuste.