Su tarea estará enmarcada dentro de la Ley 317, que establece un plazo de 60 días para la presentación de un informe detallado sobre la administración local.
Pereira explicó que su mandato implica tomar decisiones y gestionar las actividades municipales, incluyendo la evaluación del presupuesto y la planificación financiera. “Lo primero que voy a hacer es mirar el presupuesto y evaluar la planificación financiera, para ver la proyección de estos 60 días. Al mismo tiempo, voy a revisar la composición de las obligaciones, empezando por los salarios y luego los compromisos ya incumplidos”, afirmó.
Destacó que la situación financiera de la Municipalidad es crítica, especialmente en el pago de intereses de bonos vencidos. “Hay intereses de los bonos que ya están vencidos sin cumplirse. Entonces, la primera tarea será determinar la situación financiera de la institución y velar por que no se resientan los servicios esenciales para la ciudadanía”, explicó Pereira.
Aseguró que su función implica tomar decisiones administrativas, pero la normativa no detalla explícitamente si puede gestionar nuevos endeudamientos. “Estoy haciendo una interpretación literal de lo que expresa la ley. No hay un artículo que taxativamente diga cómo proceder en cuanto a nuevos créditos”, aclaró.
Sin embargo, Pereira confirmó que tendrá a su cargo la gestión de todas las erogaciones municipales, lo que lo obligará a establecer prioridades en los gastos. “Va a ser mi responsabilidad decidir cómo priorizar esos gastos. Lo primero será tener un diagnóstico de los directores de cada área y analizar las obras en ejecución, su grado de avance y las obligaciones de pago”, detalló.
Adelantó que en su corto periodo de intervención, explorará mecanismos para aumentar la recaudación, especialmente entre contribuyentes morosos. “Voy a elaborar algún tipo de motivación o incentivo fiscal para el contribuyente que está en mora”, afirmó.
El interventor subrayó que su objetivo será sanear las cuentas municipales dentro del marco legal, sin comprometer la prestación de los servicios fundamentales para la ciudad.