Eduardo Nakayama, senador electo por el Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), señaló que la transición de la dirigencia de su partido debe ser tratada de forma consensuada y que la situación no puede zanjarse con entregar el poder al sector llanista, al que tildó de colaborador del cartismo.
“Creo que esto tiene que ser objeto de una conversación seria, consensuada, no traumática, para que podamos encontrar una salida a la crisis, sobre todo desde el punto de vista de encontrar a algún conductor o alguna conductora que no alinee o no se identifique demasiado con ninguno de los dos ismos, me refiero al efreainismo y al llanismo, para que se pueda reconducir el Partido Liberal hacia la transición y la tranquilidad que necesita para iniciar su proceso de reconstrucción”.
“Yo estoy de acuerdo con algunas voces que manifiestan su descontento, su hartazgo. Creo que existe una responsabilidad política compartida, aunque principalmente recae en la figura del titular del partido, pero tampoco podemos con ese criterio o esa excusa agarrar y directamente entregar el partido a una facción que ha sido abiertamente colaboradora con el cartismo en los últimos años”.
Manifestó que el conflicto entre Efraín Alegre, presidente del PLRA, y el político liberal Blas Llano perjudicó al partido.
“Creo que son concientes de eso. Blas Llano se ha apartado, con mucha madurez política, pero también siento un aire de revanchismo a penas terminadas las elecciones de intentar sacarlo a Efraín”.
“Podemos tener diferencias políticas con Efraín, pero siempre que ha obtenido la victoria, para las generales lo he acompañado. Una de las cosas que nadie le va a poder sacar es que ha enfrentado personal y directamente a Horacio Cartes y al cartismo, incluso poniendo en riesgo su vida”.
Alegre anunció este viernes que no renunciará a la presidencia del PLRA, pese a que referentes como Salyn Buzarquis y Ricardo Estigarribia manifestaran que existía predisposición de su parte de apartarse del cargo.