Este martes 20 de junio se cumplen 31 años de la promulgación de la Constitución Nacional vigente, la del 1992, publicada poco tiempo después de una dictadura de 35 años.
El abogado Robert Marcial González, presidente del Instituto Paraguayo de Derecho Constitucional, destacó la labor de los constituyentes y expresó que su trabajo es insuperable incluso en la actualidad.
“La democracia es siempre perfectible, toda obra humana se puede mejorar, pero personalmente creo que el trabajo que hicieron los convencionales en el año 92 es insuperable incluso hoy en día, porque una de las tantas dimensiones de la Constitución tiene que ver para qué sirve el Estado y cómo perfilamos el Estado para que sirva, si acaso entendemos que sirve para algo, que yo creo que sí”.
“Y Paraguay, en ese sentido, desde la propia Constitución perfiló un Estado incluyente, inclusivo, solidario, un Estado preocupado por la ciudadanía en todos los niveles, un Estado que, reconociendo los errores de su historia reciente, se ocupó en poner cerrojos para evitar la concentración en el ejercicio del poder y de esa manera filtrar los conatos de autoritarismo. Nuestra Constitución es realmente de vanguardia”.
“Basta solamente tener en cuenta que la labor que hace la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que promueve derechos fundamentales a través de sus fallos, está reconociendo hoy con sentencias lo que muchos países no pueden reconocer normativamente porque su constitución es más estrecha”.
“Sin embargo, el Paraguay espeja hoy su Constitución a la sentencia de la Corte Interamericana y no tiene nada que envidiarle. Las soluciones que hoy da el sistema americano como soluciones de vanguardia, nosotros ya la teníamos hace 31 años, y además consagradas en la Constitución”.
