Su voz serena, pero cargada de experiencia y afecto, nos permite adentrarnos en la realidad de este pulmón verde de la capital.
La Dra. Espínola aclara que no existe un plan de ampliación del zoológico, sino que la política actual está enfocada en no traer más animales exóticos.
El futuro se vislumbra con un énfasis en las especies nativas o de la región, una tendencia global que busca redefinir el propósito de estos centros.
Entre los inquilinos más emblemáticos y de alto mantenimiento, se encuentran los tigres de Bengala, resultado de un rescate del circo Osvaldo Terry en 2013. Estos majestuosos felinos, cuya reproducción en cautiverio es rara, consumen aproximadamente 7 kilos de carne al día cada uno, una dieta que nunca les falta gracias al apoyo de la Fundación del Zoológico.
🔸 ¿Cuántos animales quedan en el zoológico de Asunción?
— Monumental AM 1080 (@AM_1080) August 29, 2025
👉🏼 La Dra. Estela Espínola, veterinaria del zoológico, contó que actualmente existen unas 60 especies.#Comunidad1080 📻 #ComunidadMonumental pic.twitter.com/6uEn3WPlfU
Los tres hipopótamos son otro de los pilares exóticos: todos son machos y nacidos en el zoológico. El más joven es de 1999 con edades que van desde los 26 hasta los 42 años. Tienen una esperanza de vida en cautiverio de 40 a 50 años. Estos herbívoros son alimentados con alfalfa, vegetales y frutas, además de un balanceado especial. Su existencia marca el fin de la reproducción de su especie en el parque, siguiendo el nuevo plan maestro.
La Dra. Espínola recuerda también a los chimpancés, Congo y Chita, que vivieron juntos desde 1972 hasta alcanzar una longevidad notable de 50 años. Su relación, aunque sin descendencia, fue compleja: Congo, el macho dominante, a veces maltrataba a Chita. Tras la muerte de Congo por un paro cardiorrespiratorio, Chita sobrevivió unos cinco años, volviéndose más mimosa en ausencia de su compañero, con quien convivió “pese a la violencia”.
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También reside en el zoológico “Chiquita”, la última mona araña, una especie originaria de Centroamérica. A sus 36 años, una edad muy avanzada para su especie, Chiquita está ciega y vive en un área de cuarentena, recibiendo cuidados especiales y geriátricos.
El zoológico alberga igualmente una rica variedad de especies nativas, como guacamayos, tucanes, tapires, venados y los carpinchos (capibaras), cuya llegada ha atraído a “muchísima gente”.
Sin embargo, la profesional subraya que uno de los mayores desafíos es el comportamiento “muy malo” de algunos visitantes.
“La gente todavía cree que se va a ver un show que el animal tiene que posar para ellos”
Comenta que hay que gente que lanza objetos o comida a los animales, o se enojan si estos están descansando y no se exhiben.
A pesar de los retos, la Dra. Espínola manifiesta un profundo cariño por “toditas” las especies. Relata con sorpresa cómo los animales silvestres, incluso los que uno esperaría distantes, reaccionan a una muestra de afecto, reconociendo a sus cuidadores. Los tapires y carpinchos, por ejemplo, responden a la presencia de la doctora.
La seguridad es primordial, especialmente con animales como los tigres, que residen en recintos “muy seguros” con doble y triple vallado e incluso alambrado eléctrico para evitar escapes. La veterinaria asegura que, en sus más de 15 años, no ha habido incidentes de animales escapados.
El zoológico también ha sido testigo de incidentes pasados, como el ataque de un chimpancé al Dr. Tuma o el trágico suceso con la elefanta Maia (fallecida hace 5 años) que se cobró la vida de un niño que se coló en su recinto en busca de una pelota. Estas historias refuerzan la necesidad de precaución y respeto.
