Emiliano Rolón, fiscal general del Estado, afirmó este lunes que el Ministerio Público analiza abrir una carpeta y disponer la creación de un nuevo equipo fiscal para investigar las acusaciones del supuesto articulador del crimen del fiscal Marcelo Pecci contra el expresidente Horacio Cartes y el presunto narcotraficante Miguel Ángel Insfrán, alias Tío Rico.
Rolón manifestó que en la fecha se tendrían noticias al respecto.
“Dado el cariz que van tomando los últimos acontecimientos, naturalmente estamos examinando la viabilidad de instalar en forma permanente una carpeta fiscal ateniente a esta trasnacionalidad”.
“Las doctrinas y las actuaciones de los sistemas penales de diferentes países trabajan en una suerte de cooperación. En este caso es posible instalar ese segundo debate a través de un nuevo equipo de trabajo y de unos nuevos fiscales que se asignen a partir de ahora”.
Al ser consultado si la Fiscalía paraguaya, a partir de la creación de esta carpeta, tendrá interés en ir hasta Colombia y tomar declaración a Francisco Luis Correa Galeano, supuesto articulador del crimen de Pecci, respondió:
“Correcto, de ahí empezamos hoy. Estamos siempre en momentos evaluativos con personas que son operativas y serán operativas. Es el trabajar en equipo lo que nos lleva a hacer parcos en definir el tema hasta que sea oportuno. Yo creo que hoy habrá una noticia al respecto”.
Correa Galeano acusó al expresidente y a Insfrán de ser los autores intelectuales del asesinato, ocurrido en mayo de 2022 en Colombia.
Respecto a su parecer de la acusación del sospechoso del crimen, afirmó que esta se debe tomar con la “laxitud que merece” y agregó que se debe cotejar y comparar con otras evidencias.
“No debemos olvidar que es un acusado y que a lo largo del proceso investigativo, en ningún momento dio alguna connotación... Alguna claridad conceptual surge del último testimonio, pero en otro momento se mostró dubitativo y parco. Hay muchas cosas que cotejar y principalmente compararlo y cruzarlo con otras evidencias. A eso vamos ahora”.
“La mención de un acusado tiene que tomarse con la laxitud que merece esa actuación. Tenemos que comparar, tener evidencias. No es que el fiscal sea tibio, sino por el contrario, el diseño de las garantías en nuestro sistema constitucional exige este tipo de actitudes”.