El economista y exministro de Hacienda, Manuel Ferreira, analizó el impacto del endeudamiento en Paraguay y advirtió sobre los riesgos que representa para la economía familiar. Según Ferreira, los niveles de deuda son elevados, pero el problema más grave radica en la prevalencia de compromisos financieros a corto plazo, lo que reduce la capacidad de los ciudadanos para generar nuevas deudas sin afectar su estabilidad económica.
El economista explicó que muchas familias destinan gran parte de sus ingresos al pago de cuotas y préstamos, lo que limita su capacidad de consumo y ahorro. “Si tenés que pagar 3, 4, 5 millones de guaraníes de cuentas o de cuotas por algunos bienes y ganas 7, 8 millones de guaraníes, lo que te queda es muy poco para poder generar otra deuda”, advirtió, subrayando la importancia de tomar precauciones en el manejo de los compromisos financieros.
Señaló que la expansión de la clase media y baja ha generado un aumento en la adquisición de bienes, lo que ha incrementado la demanda de crédito. En los últimos cinco años, Paraguay importó aproximadamente 17 millones de electrodomésticos y 400 mil vehículos, lo que refleja un crecimiento en el consumo financiado con deuda.
“Nosotros estamos subiendo nuestro consumo más o menos a valor de 300 megavatios por año. La represa Acaray tiene 200 megavatios. Eso quiere decir que estamos demandando un Acaray y medio nuevo todos los años”, ejemplificó.
El economista también mencionó que la pandemia afectó significativamente la capacidad de pago de los ciudadanos, quienes debieron reestructurar sus deudas para poder afrontarlas. “La situación no ha sido fácil porque mucha gente se quedó sin facturar durante un tiempo relativamente largo”, explicó.
Actualmente, la deuda promedio de un trabajador paraguayo ronda los 6.200 dólares, lo que equivale a aproximadamente ocho meses de salario. “La deuda promedio de un trabajador anda más o menos por los 6.200 dólares en valores redondos”, puntualizó.
Comparando la situación con otros países, Ferreira destacó que en Chile el nivel de endeudamiento promedio equivale a 70 u 80 meses de salario, mientras que en Estados Unidos este indicador asciende a 140 meses. “Todavía la gente está accediendo a bienes que le generan un impacto de corto plazo”, afirmó.
Además, señaló que el 78% de la población trabaja en pymes y enfrenta dificultades para demostrar ingresos debido a la informalidad laboral. “En muchos casos el ingreso que se tiene es un ingreso informal. Es un ingreso que no se factura, que no es regular en muchos casos”, explicó.
Ferreira advirtió que el problema del endeudamiento requiere soluciones estructurales, que permitan a los ciudadanos mejorar su acceso al crédito sin comprometer su estabilidad financiera.