La Organización de Trabajadores de la Educación del Paraguay Auténtica Sindicato Nacional (OTEP-A) rechaza el aumento salarial que el Presidente de la República, Santiago Peña, y los parlamentarios pretenden otorgarse a sí mismos, al considerarlo una ofensa a la mayoría de la ciudadanía y una falta de prioridad ante las necesidades del sistema educativo y de otros sectores.
Gabriel Espínola, dirigente de la OTEP-A, expresó su indignación por la adenda de ocho mil millones de guaraníes, que el presidente Peña justificó por el impacto de la inflación en los trabajadores del parlamento.
“No lo tomamos bien, como mínimo es una ofensa a la mayoría de la ciudadanía que no tiene trabajo, que no tiene empleo fijo, a los funcionarios que no tienen una remuneración acorde inclusive a su función, los trabajadores del Estado en general”, dijo.
El dirigente sindical recordó que los docentes llevan 23 años reclamando el salario básico profesional establecido en el Estatuto del Educador, y que este año tuvieron que amenazar con movilizaciones para lograr una adenda que les permita alcanzarlo recién en julio del 2024.
Asimismo, denunció que hay resoluciones de escalafón desde noviembre del 2020 que no se perciben, y que hay compromisos para el 2024 que no garantizan el pago de retroactivos ni la reinscripción al nuevo quinquenio.
Espínola también enumeró algunas de las necesidades que tiene el sistema educativo, como la provisión de agua potable, bibliotecas y espacios adecuados para las comunidades indígenas y los contextos de encierro.
“Creo que hay mucho más necesidades que el de acrecentar el ingreso de los parlamentarios y lamentablemente hay una gran decepción a ese discurso que en algún momento lo habían dicho. Quizá nosotros tampoco tenemos la comprensión lectora de qué quiere decir vamos a estar mejor”, concluyó.