La Superintendencia de Salud clausuró de forma definitiva este viernes dos empresas de seguro médico tras la conclusión de sumarios contra las mismas.
Se trata de las firmas Canusa Group S.A y Livi, Salud Preventiva.
El superintendente Roberto Melgarejo señaló que en el caso de la primera, no presentó ninguna documentación requerida reiteradamente por la institución. Mencionó que la Superintendencia no cuenta con ninguna información de la existencia de la empresa, pese a estar habilitada.
En el caso de la segunda firma, señaló que se constató un “grave deterioro de su patrimonio”. “Eso significa que no tiene los avales para cumplir con sus prestadores de su servicio y tampoco con sus asegurados”, dijo Melgarejo.
Explicó que la investigación inició contra un grupo de empresas que no cumplían una solvencia mínima. Se les pidió documentación financiera y contable.
“Si la empresa no tiene solvencia, difícilmente va a poder cumplir con las cuestiones contractuales que toma el seguro médico. Por ejemplo, justo mi mamá tiene que internarse, me voy, presento mi seguro y en el sanatorio me dicen ‘nosotros no trabajamos más con este seguro porque nos adeuda’”.