El abogado Guillermo Duarte Cacavelos celebró el fallo del Tribunal de Sentencia que sobreseyó al ex candidato presidencial Efraín Alegre, luego de que se anulara la acusación fiscal por un cambio en los hechos imputados. El jurista afirmó que el proceso judicial tuvo como objetivo atacar políticamente a su defendido y que no se sustentó en pruebas válidas.
“Este proceso tenía como finalidad meter preso a Efraín o atacarlo, no había hecho de impunidad”, declaró el abogado, y explicó que el Tribunal reconoció que los fiscales no fueron responsables del inicio del caso, por lo que no se les impuso ninguna sanción. “El Tribunal dijo que no se le imponía nada a los fiscales porque no fueron los que comenzaron el trabajo”, sostuvo.
El caso contra Alegre se originó por supuestas irregularidades administrativas durante su gestión como presidente del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), pero la Fiscalía modificó los hechos imputados en el transcurso del proceso, lo que derivó en la nulidad de la acusación. El Tribunal consideró que esa alteración vulneró el derecho a la defensa y resolvió el sobreseimiento definitivo.
Duarte Cacavelos también se refirió a otro caso que representa, relacionado con una denuncia de violencia contra una mujer por parte de un empresario. El abogado aclaró que asumió la defensa por convicción personal y por el contexto en que se dio la denuncia.
“Siempre que tomo un caso siempre lo hago por un motivo, y este, en particular, lo tomé no porque no haya existido el hecho punible de violencia”, explicó. El jurista defendió el principio de presunción de inocencia y el derecho a un juicio justo, incluso en casos complejos.
“Independientemente a que haya ocurrido o no, hasta satanás tiene derecho al mejor de los juicios”, afirmó. Duarte Cacavelos denunció que su cliente fue víctima de una extorsión por parte de la denunciante. “El supuesto agresor había sido extorsionado por la mujer por un monto de USD 100.000 para no realizar la denuncia”, aseguró.
