La fiscal Sánchez, quien investiga la supuesta falsificación de títulos universitarios por parte de los legisladores Hernán Rivas y Orlando Arévalo. solicitó a las universidades Sudamericana y Leonardo Da Vinci que le remitan los antecedentes académicos de los denunciados, así como otros requerimientos del Ministerio Público. El plazo para hacerlo venció hoy, y solo la Sudamericana cumplió con lo pedido.
“Nosotros estamos hasta las 13 del mediodía, esperamos que nos traigan a ese tiempo. Ellos saben que nosotros estamos administrativamente hasta las 13 horas y deben traer en ese horario”, dijo Sánchez.
Explicó que está iniciando la investigación con base en la denuncia formulada por la doctora Case Jiménez, quien cuestiona la autenticidad de los títulos otorgados por las mencionadas universidades a los legisladores.
Dijo que busca “nutrir los elementos que están configurados en el tipo penal para ver si logramos la existencia de una conducta típica para formular eventualmente imputación e iniciar formalmente un proceso”.
Señaló que el delito de producción de documento no auténtico prevé dos tipos de conducta: el que produce el documento y el que lo usa a sabiendas. Aclaró que un documento no auténtico es aquel que “no provenga de la persona que figura como su autor” y que contiene firmas, sellos, legalizaciones e información falsa o adulterada.
La fiscal indicó que la universidad Sudamericana no le entregó las actas firmadas por los docentes que supuestamente impartieron clases al senador Rivas. La universidad argumentó que no tiene la obligación de guardar esos documentos por más de cinco años, según una analogía que hizo con normas de carácter civil y comercial.
