La Contraloría General de la República se encuentra analizando las reservas de las empresas vinculadas al expresidente Mario Abdo Benítez. Armindo Torres, director de Declaraciones Juradas, proporcionó detalles sobre los hallazgos y las posibles irregularidades.
“La Contraloría no considera ilegal destinar utilidades a reservas, pero sí le llamó la atención que aproximadamente el 90% de la utilidad generada se destinara a este fin”, según dijo Torres.
La Contraloría observó que en los periodos 2020, 2021 y 2022, en plena gestión presidencial de Abdo, las empresas canalizaron íntegramente sus utilidades hacia las reservas.
La Dirección Nacional de Ingresos Tributarios (DNIT) fue consultada sobre el destino específico de estas reservas y señaló que le llamó la atención la falta de disminución de las reservas.
Torres mencionó que un cuadro comparativo reveló que el 60% de las reservas estaban constituidas por deudores por ventas.
Sin embargo, al verificar los estados financieros de otras empresas, no coincidían con los montos declarados como deuda. El monto que no coincide asciende a alrededor de 10.000 millones.
“Además, hay un ítem en blanco que requiere una investigación más profunda, ya que la DNIT no tuvo acceso completo a los estados financieros”, añadió Torres.
