La senadora del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), Celeste Amarilla, denunció que el senador Luis Pettengill, del Partido Colorado, violó la Constitución Nacional al no desprenderse de sus empresas proveedoras del Estado antes de las elecciones y al votar un proyecto de ley que beneficiaba a una de sus firmas.
Según Amarilla, el Tribunal Superior de Justicia Electoral (TSJE) permitió que Pettengill fuera candidato y luego senador, pese a que la ley establece que los aspirantes a cargos electivos deben vender sus acciones de empresas estatales 90 días antes de los comicios.
“No se deshizo de sus empresas tal como exige la ley y el TSJE le permitió ser candidato y luego entró”, sentenció.
La legisladora liberal afirmó que ella cumplió con ese requisito y vendió su empresa a en febrero del 2018, mientras que Pettengill solo transfirió sus acciones a su hija, lo que no elimina el conflicto de intereses.
“El TSJE miró otro lado como siempre cuando se trata del Partido Colorado. Yo creo que eso entonces ya precluyó, tampoco en mi Partido, pelotudos como siempre, no le impugnamos, porque estaba violando un requisito”, manifestó.
Además, acusó a Pettengill de haber votado un préstamo especial para el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) para pagar a las empresas constructoras de rutas, entre las que se encontraba Ocho A SA, de la cual Pettengill es accionista mayoritario.
La senadora liberal dijo que le advirtió al presidente del Senado que Pettengill tenía una incompatibilidad con esa ley y que no debía opinar ni votar, pero que fue ignorada y el senador colorado participó igual de la sesión. “Me gritaron de todo, me dijeron de todo y votó igual”, recordó.
Amarilla señaló que la Contraloría General de la República confirmó que Pettengill incurrió en un conflicto de intereses al votar ese proyecto de ley, lo que podría configurar un uso indebido de influencia y acarrearle una multa o una sanción mayor.
Añadió que otro legislador de su partido, Dionisio Amarilla, tiene la misma inhabilidad que Pettengill, ya que es dueño de una empresa de transformadores que vendía a la ANDE y que le transfirió las acciones a su hijo.
