El Gobierno presentó este lunes el proyecto de ley hambre cero en escuelas, que busca garantizar el almuerzo escolar durante todo el año a todos los estudiantes del país. La iniciativa surge como una respuesta al fracaso del Fonacide, el fondo de inversión social que estaba a cargo de las municipalidades y gobernaciones.
Lea Giménez, jefa de Gabinete de la Presidencia, explicó que el proyecto implica “uno de los cambios más trascendentales que experimenta el Fonacide desde su nacimiento”, ya que se destinará el total de los recursos a la alimentación escolar, que será administrada por el Ministerio de Desarrollo Social.
“La realidad de lo que sale del informe de la Contraloría, gran parte no se realizaron”, dijo Giménez, refiriéndose a las obras de infraestructura educativa que debían financiarse con el Fonacide. “Lamentablemente tenemos que decir que es un proyecto fallido, a través de los años los medios han puesto a luz cuando los recursos eran mal utilizados”, agregó.
La jefa de Gabinete señaló que el proyecto de ley hambre cero contó con el consenso de todos los sectores políticos, ya que “lo que primó es el objetivo final, que es llevar un plato de comida a los niños y que alcance para todos”.
Asimismo, destacó que el Ministerio de Desarrollo Social tendrá la capacidad de implementar el programa en todo el territorio nacional, con el apoyo de la Opaci, que representa a los municipios.
Giménez aclaró que el proyecto no afectará al programa Becal, que otorga becas a estudiantes de excelencia. “Becal tiene recursos actualmente, seguirá funcionando y operando”, aseguró.
