El ministro del Interior, Enrique Riera, aseguró que el intento de invasión a la estancia Lusipar, en el departamento de San Pedro, quedó desarticulado tras la intervención de las fuerzas de seguridad y la Fiscalía. El secretario de Estado lamentó que fracasaran los intentos de diálogo previos con los líderes campesinos que encabezaron la movilización.
Riera explicó que mantuvo reuniones con referentes del grupo en varias ocasiones. “Yo los reunía a Rogelio Benítez, a su hermano, a los Gamarra, tres veces por lo menos en el ministerio durante el proceso, hace tres, dos meses, explicándoles que si la necesidad era tierra, o era cal agrícola, o era tractores, o era semilla, que me traigan una lista de los beneficiarios”, relató. Sin embargo, afirmó que nunca recibió la documentación solicitada.
Recordó que las tierras de Lusipar no eran objeto de reforma agraria. “Estas tierras no son sujetos a la reforma agraria, porque la ley de Senabico tiene una finalidad distinta: sacarle los bienes a los varones de la droga, para que con su venta o renta, una vez que pierdan el dominio, puedan ser rematadas, y ese dinero se deposita en una cuenta para recuperar a los adictos a través del Plan Sumar”, explicó.
El ministro señaló que la falta de entendimiento con los dirigentes campesinos generó tensiones. “Nunca pude hacerles entender, la última vez casi dieron un portazo, se levantaron muy molestos y nos dijeron que lo iban a hacer”, manifestó. Añadió que hasta último momento intentó evitar el enfrentamiento. “La noche antes de los incidentes, hasta las 11 y media de la noche, yo estuve hablando a través del gobernador de San Pedro, el ministro de Agricultura, inclusive le informé al cardenal”, indicó.
Destacó que la Iglesia también intervino en el proceso. “La iglesia arrojó una actitud muy fuerte y entendió perfectamente la situación”, afirmó. Explicó que la Fiscalía ordenó la captura de ciertos líderes y conformó un equipo especial para garantizar el cumplimiento de la ley. “La policía auxiliar la justicia y recibió unas órdenes concretas, de detener a ciertos líderes, por un lado, y por otro lado, de defender la propiedad privada, que te repito, no es pública, todavía no está en nombre del Senabico”, puntualizó.
