Codas recordó que el Movimiento al Socialismo (MAS) mantuvo el poder durante 19 años, desde la llegada de Evo Morales en 2005, y que ese largo ciclo dejó una estructura institucional difícil de desmontar. Sin embargo, en 2014 los precios comenzaron a caer y el Estado boliviano recurrió al endeudamiento.
Sostuvo que Rodrigo Paz tendrá “muy poco margen de maniobra” para sostener el país, debido a las restricciones fiscales y a la falta de divisas. “Porque dijo que va a descentralizar el presupuesto del país y reducir impuestos al 10% y ofrecerá créditos para la producción y el comercio”, indicó. El nuevo presidente también propuso una reducción de aranceles para mejorar la competitividad, pero el analista consideró que esas medidas requerirán recursos que hoy Bolivia no posee.
“La lucha contra la corrupción también está en su programa”, señaló Codas, aunque advirtió que Paz delegó muchas iniciativas a su vicepresidente. En materia de relaciones internacionales, el nuevo gobierno planteó vínculos más estrechos con Argentina y Chile, con énfasis en programas contra el contrabando y el narcotráfico. “En relaciones internacionales plantea una relación cercana con Argentina y Chile”, afirmó.
Codas destacó que Paz expresó su intención de mantener relaciones diplomáticas fluidas con democracias, pero advirtió que Bolivia no puede prescindir de China como socio estratégico. El nuevo presidente también prometió transparencia en los contratos relacionados con los yacimientos de litio, aunque Codas advirtió que recuperar la disponibilidad de dólares será una tarea difícil.
“Le costará recuperar la existencia de dólares, que no hay en ese país”, afirmó. El analista sugirió que Bolivia debería reformar su Constitución para facilitar la inversión extranjera en el sector gasífero.