Daniel Ochipinti denunció que su padre, paciente oncológico en el Instituto Nacional del Cáncer (INCAN), no fue atendido esta mañana en el servicio de radioterapia. “Mi papá hace radioterapia, tiene 23 sesiones que tiene que hacerse, ahora va por el décimo tercero, y se va posponiendo más”, relató.
Explicó que llegaron desde Limpio a las 4:30 de la madrugada para asegurar el turno, pero encontraron el área cerrada. “Ya eran las 7 de la mañana y estaba cerrado el tema de la radioterapia. Nos dijeron que era por el decreto presidencial, pero toda la información la recibimos solamente del guardia, no había ningún funcionario”, afirmó.
El denunciante señaló que otros pacientes también están afectados. “Había un paciente que vino de Lambaré, uno de Caaguazú y otro de Villarrica que llegaron a las 2 o 3 de la mañana y se fueron nuevamente. No había ningún papel en la ventana del servicio que explique la ausencia”, sostuvo.
Ochipinti manifestó su preocupación por la salud de su padre, quien no puede trasladarse con facilidad. “No podemos arriesgarle con la defensa baja que tiene, así que solamente entramos en coche nuevamente sin que reciba su radioterapia”, lamentó.
Recordó que ya habían tenido inconvenientes previos en el INCAN. “Varias veces mi papá esperó 4 o 5 horas y el médico no apareció. Lo que más me preocupa es que esto es un centro de referencia y no debería ocurrir”, lamentó.