La institución ejerció controles previos y dejó recomendaciones específicas, aunque la denuncia por agresión física a un hombre de 83 años, captada por cámaras de seguridad, reactivó la fiscalización estatal del centro.
La funcionaria enfatizó que el caso revela problemas más profundos, como el abandono sistemático que sufren las personas mayores. “El 90% de esas personas mayores, siempre son abandonadas por sus familiares. Eso es categórico y no hay que invisibilizar también ese aspecto”, afirmó con firmeza.
Samaniego explicó que la Dirección trabaja con tres modalidades de atención: hogares de estadía permanente, centros vía y comedores comunitarios para personas mayores. Bajo ese marco, el Ministerio realiza verificaciones periódicas para evaluar aspectos técnicos, humanos y legales.
El hogar tenía condiciones básicas, pero carecía de equipo profesional permanente
Según el informe posterior a la visita, el hogar presentó una infraestructura limpia y condiciones básicas de atención, como ropa adecuada, dormitorios ordenados y áreas comunes con actividades ligeras, pero no reunía uno de los requisitos esenciales para operar con estándares plenos: un equipo interdisciplinario permanente.
“El permanente de un equipo médico, enfermera, nutricionista, psicólogo, psicoterapeuta es obligatorio para este tipo de establecimientos”, remarcó Samaniego. Agregó que estos requerimientos aplican específicamente a hogares privados, que deben cumplir estándares diferenciados de la red pública dependiente de la Dirección.
La asesora aclaró que el Ministerio no acudió por primera vez al hogar tras el incidente, sino que el lugar ya estaba bajo seguimiento en el Departamento de Registro, con recomendaciones previas sobre documentación, habilitaciones municipales y validación sanitaria. “Al no tener todos los requisitos completos, dejamos las sugerencias para avanzar, pero el cumplimiento depende de los responsables”, dijo.
La Fiscalía imputó a a una cuidadora del hogar de ancianos Santa Cecilia por violación del deber del cuidado de ancianos y discapacitados, tras la viralización del circuito cerrado en la que fue captada golpeando a un abuelo de 83 años.