El ministro de Defensa Nacional, Óscar González, confirmó este viernes la llegada de los primeros cuatro aviones Super Tucano A-29 adquiridos a la empresa brasileña Embraer, en el marco de un acuerdo de renovación y fortalecimiento operativo de la Fuerza Aérea Paraguaya (FAP).
“Definitivamente los aviones llegan para las doce y media. Vamos a recibir por fin los aviones. Cuatro de seis ya fueron adquiridos, y esperamos que los otros dos lleguen antes de fin de año. Esa es la meta que estamos teniendo desde el gobierno”, expresó el ministro González.
El titular de Defensa subrayó que esta adquisición representa la inversión más significativa en la Fuerza Aérea en los últimos 38 años, con implicancias profundas en capacitación, transferencia tecnológica y operatividad táctica. “Hace 38 años no se hacía una inversión tan importante en la Fuerza Aérea y en toda la Fuerza Armada de la Nación”, destacó.
El paquete acordado con Embraer incluyó no solo la compra de seis aeronaves Super Tucano, sino también mantenimiento, provisión de repuestos y capacitación integral de los pilotos paraguayos, quienes ya completaron un ciclo de entrenamiento en Brasil. “Los pilotos que están viniendo ahora con los aviones son ya pilotos paraguayos entrenados. Ese entrenamiento continuará por tres meses más”, explicó.
González definió a los Super Tucano como aeronaves de conocimiento y combate, caracterizadas por una alta versatilidad táctica. Aunque evitó divulgar públicamente datos específicos sobre velocidad de crucero o capacidad balística, aseguró que los aparatos fueron personalizados con tecnología y armamento diseñados específicamente para las misiones asignadas por la Fuerza Aérea Paraguaya.
“Nosotros tenemos un convenio con Embraer, y estos aviones traen las especificaciones técnicas que la Fuerza Aérea Paraguaya indicó. La línea del gobierno fue clara: no se debe gastar en equipos que no se van a utilizar”, afirmó. También justificó el sigilo técnico con argumentos de seguridad nacional: “Dar detalles técnicos podría alertar a actores del crimen organizado, y por eso decidimos mantener en reserva algunas capacidades”.