“Llegamos justo, pero llegamos”, declaró Pereira al evaluar la situación de la Municipalidad al 31 de julio. El interventor detalló que ayer se abonaron los salarios del mes, exceptuando a los entes descentralizados como la Terminal de Ómnibus, el Mercado de Abasto, el Centro Paraguayo Japonés y el Policlínico Municipal. “Ellos están apartados de la administración central. Solo faltó procesar sus planillas. Hoy en la mañana se hará el pago sin problema”, aseguró.
Confirmó que el municipio avanzó en los pagos a proveedores de servicios esenciales, como emulsión asfáltica, combustible para camiones recolectores y otros insumos indispensables para el funcionamiento cotidiano de la ciudad. “Estamos cuidando y conversando con los distintos proveedores, tanto financieros como no financieros”, explicó.
Señaló que se mantiene una estrategia de contención para evitar que los servicios se resientan, a pesar de las limitaciones del flujo de caja. “Hasta ahora, el flujo está muy ajustado, pero gracias al acercamiento de los contribuyentes, logramos superar la barrera de los G. 3.500 millones de recaudación diaria, cuando antes estábamos por debajo de los G. 2.000 millones”, indicó.
Pereira heredó una estructura financiera comprometida, con varios cupones vencidos antes y durante su gestión. “Al asumir el 24 de junio, ya estaba impaga una cuota de interés del bono de G. 15.123 millones, vencida el 27 de mayo. Luego, el 9 de junio venció otro cupón de igual monto sin ser abonado”, relató.
Durante julio, se acumularon dos vencimientos adicionales: el 16 de julio, por G. 16.424 millones, y el 21 de julio, por G. 3.428 millones.
Ante este escenario, el interventor comenzó a estructurar un flujo de caja proyectado para agosto, con base en la recaudación y los compromisos vencidos. “La idea es acomodar estos vencimientos y amortizar gradualmente el pasivo, que incluye deudas del 2023 y 2024”, explicó.
El interventor reveló que trabaja en la elaboración de un certificado de deuda municipal, inspirado en experiencias de países vecinos. “En la región, los certificados de deuda son instrumentos muy utilizados en el mercado de capitales, porque le dan dinámica y credibilidad a los compromisos públicos”, afirmó.
Además, anunció que evalúa posponer la fecha límite de exoneración tributaria, ya que la ciudadanía se acerca voluntariamente a pagar sus tributos, lo que constituye una señal positiva de recuperación.
“Aprovecho para agradecer a los contribuyentes. Su voluntad de pago es muy relevante para mantener el municipio en marcha”, sostuvo.