El periodista Carlos Benítez, del medio El Observador, denunció que su vivienda ubicada en la ciudad de Lambaré fue atacada a balazos en la noche del jueves. El comunicador atribuyó el atentado a sus investigaciones sobre la mafia de los pagarés, tema que viene abordando con frecuencia en sus publicaciones y por el cual ya había recibido amenazas.
Benítez relató que el ataque se produjo entre las 19:30 y las 21:30 horas, mientras él se encontraba fuera de su domicilio. Me voy al programa de la radio y vuelvo recién después a casa. En ese lapso de tiempo se habría registrado estos disparos”, explicó. El periodista estimó que se realizaron al menos dos disparos.
Los proyectiles impactaron contra la puerta principal de madera de la vivienda, atravesaron la sala y rompieron el vidrio de una ventana que da al quincho. “La madera de la puerta estaba esparcida por diferentes partes de la sala y el comedor. Era como si fuera que esa bala explota y esparce más cosas en el interior”, describió.
Los efectivos policiales levantaron las evidencias en el lugar y la fiscal de turno de Lambaré se presentó para realizar los procedimientos correspondientes. Aseguró que el calibre del arma utilizada fue “interesante, importante”, según la apreciación de los agentes intervinientes. Aunque Benítez dijo desconocer detalles técnicos sobre armas, destacó la potencia del disparo por la trayectoria que recorrió dentro de la vivienda.
Respecto al origen del ataque, Benítez fue contundente. “Yo en un 90% y quizás más le atribuyo al tema de la mafia de los pagarés”, afirmó. El comunicador explicó que recibió ataques a través de perfiles falsos en redes sociales, con mensajes que fueron subiendo de tono. “Había una suerte de advertencia en doble sentido y algunos se pasaban la raya”, señaló.
Benítez reveló que en su momento contactó con una fiscala de delitos informáticos para intentar identificar el origen de las amenazas. “Cuando yo me daba cuenta por los mensajes que me estaban haciendo un seguimiento bastante cercano, pasé algunos antecedentes, algunos links y comentarios debajo de publicaciones periodísticas”, indicó.
Uno de los mensajes que más lo impactó hacía referencia a su situación habitacional. “Como tenía la casa en refacción, yo había estado dos o tres días viviendo en un departamento. Uno de los mensajes decía que para que yo no tenga que estar andando de un lugar a otro, ellos tenían un lugar seguro para mí”, relató. Para Benítez, ese mensaje evidenció que los agresores lo estaban siguiendo y controlando.