“Su nivel de recuperación fue bastante satisfactorio para el tipo de evento que él tuvo”, afirmó Querey. El médico explicó que Lugo lleva una vida tranquila, sin necesidad de medicación intensiva. “Está estable, sin demasiada medicación, salvo los normales para una persona de su edad”, indicó. También confirmó que el expresidente “habla, se comunica bien, comprende bien” y que “todas las funciones gruesas que uno cumple normalmente, él también las cumple”.
Querey reconoció que Lugo presenta algunas limitaciones en la conversación, pero aclaró que no afectan su calidad de vida. “Tiene una vida satisfactoria, vamos a llamarle”, expresó. En los últimos días, el exmandatario atravesó una virosis leve, pero se recuperó sin mayores inconvenientes. “Estuvo con una pequeña virosis, pero estaba sin mayor inconveniente, una virosis común”, señaló.
El médico confirmó que Lugo reside en su domicilio particular y cuenta con asistencia permanente. “Él vive en su casa y tiene acompañamiento. El resto de los familiares no viven con él directamente”, explicó. La asistencia médica y personal se mantiene desde hace tiempo, como parte de su rutina de cuidados.
Respecto a su participación política, Querey aclaró que Lugo no mantiene ninguna actividad formal. “Él no tiene ningún nivel de actividad política en este momento, salvo una o dos presencias más simbólicas que se hicieron en algún evento”, indicó. Sin embargo, el médico mencionó que mantienen encuentros frecuentes. “Solemos compartir con bastante frecuencia comer un asadito, un almuerzo, una cena”, comentó.
El episodio que obligó a Lugo a retirarse de la política ocurrió en agosto de 2022, cuando sufrió un accidente cerebrovascular mientras se encontraba en el Senado. El evento requirió su internación inmediata y posterior traslado a Buenos Aires para una intervención especializada. Tras varios meses de tratamiento, regresó al país y continuó su recuperación en su casa.